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hace 1 díael
Por
Carlos GavilanesMaría José Alba Lozano
El uso de medicamentos como Ozempic, un tratamiento para la diabetes tipo 2, aumenta gran popularidad en redes sociales como una solución rápida para perder peso. Sin embargo, la doctora Sara Calderón, médico general y nutricionista del Hospital Teófilo Dávila, alerta sobre los riesgos que implica la automedicación con estos fármacos, especialmente cuando se utilizan sin la debida supervisión médica.
En una entrevista con Diario Correo, la doctora Calderón explicó que Ozempic, cuyo principio activo es la semaglutida, tiene un efecto secundario de inducir saciedad, lo que genera una reducción en el apetito. Este mecanismo lleva a muchas personas a recurrir al medicamento como una opción para adelgazar rápidamente, sin contar con la valoración médica adecuada.
“Este medicamento es principalmente un antidiabético, cuyo objetivo es controlar los niveles de glucosa en sangre en pacientes con diabetes tipo 2”, detalló Calderón. “Su efecto de pérdida de peso es secundario, ya que reduce el hambre, lo que provoca que el paciente ingiera menos alimentos. Sin embargo, no es un medicamento milagroso y no debe usarse sin una adecuada evaluación médica”, agregó.
RIESGOS ASOCIADOS AL ABUSO DE OZEMPIC PARA ADELGAZAR
La doctora resaltó que, aunque el medicamento puede ser útil en ciertos casos de obesidad, su uso indiscriminado, especialmente en personas sin diabetes o sin una evaluación médica, conlleva serios riesgos para la salud. Entre los efectos secundarios más comunes mencionados por Calderón están las náuseas, vómitos y diarreas, que son frecuentes en los pacientes que lo consumen sin supervisión.
“Aunque algunas personas lo ven como una solución rápida para perder peso, este medicamento tiene efectos adversos y debe ser usado con precaución. En muchos casos, cuando el paciente deja de usarlo, se puede experimentar un efecto rebote, donde se recupera el peso perdido”, explicó.
IMPORTANCIA DE UNA CONSULTA MÉDICA
La doctora también hizo hincapié en la importancia de que el uso de Ozempic sea supervisado por un profesional de la salud, tanto médico como nutricionista. “Es esencial que los pacientes sean evaluados primero para determinar si realmente necesitan este tratamiento y si sus antecedentes médicos lo permiten. Muchas veces, los pacientes que buscan perder peso con medicamentos como Ozempic también tienen otras condiciones, como hipertensión o problemas cardíacos, lo que hace necesario un seguimiento más riguroso”, indicó.
En cuanto a la dosis, la doctora aclaró que el tratamiento para la pérdida de peso difiere del utilizado para la diabetes, lo que hace aún más importante la supervisión de un especialista. “Cada paciente tiene diferentes necesidades, y las dosis deben ajustarse según el caso particular. El uso indebido de estos medicamentos puede ser perjudicial, por lo que es fundamental no automedicarse”, enfatizó.
EL ROL DE LAS REDES SOCIALES Y LA AUTOMEDICACIÓN
Las redes sociales, en particular plataformas como TikTok, juegan un papel importante en la difusión del uso de Ozempic y otros medicamentos para adelgazar. La doctora Calderón señaló que, si bien las redes pueden ser una fuente de información, no siempre son confiables cuando se trata de salud. “Las recomendaciones que circulan en internet no reemplazan la consulta con un médico. Cada cuerpo es diferente y lo que funciona para una persona puede no ser adecuado para otra”, advirtió.
En este sentido, la especialista recalcó que la automedicación puede ser peligrosa, no solo por los efectos adversos del medicamento, sino también porque las personas que lo utilizan sin control médico podrían estar ignorando posibles interacciones con otras condiciones de salud.
COSTO DE OZEMPIC Y SU VENTA RESTRINGIDA
La creciente demanda de Ozempic para perder peso también genera una serie de cambios en su disponibilidad. Anteriormente, este medicamento se podía conseguir con relativa facilidad, pero tras las alertas sanitarias, ahora su venta está restringida. “Este medicamento solo se puede adquirir con receta médica”, explicó Calderón, destacando que ahora se requiere una prescripción para poder comprarlo, lo que busca evitar su uso indiscriminado.
Además, el costo de Ozempic, que antes era considerablemente elevado, se ve una disminución gracias a la competencia en el mercado. A pesar de ello, el precio sigue siendo un factor importante a tener en cuenta, ya que la inversión mensual puede superar los $900, dependiendo de la marca y la dosis. “Aunque el costo ha bajado algo, sigue siendo un tratamiento costoso, especialmente cuando se usa sin la supervisión adecuada”, comentó la doctora.
ARCSA
A raíz de la creciente demanda de Ozempic para fines estéticos, la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) alerta sobre la escasez de estos productos en el mercado, así como el aumento de la circulación de medicamentos falsificados. “Esto agrava la situación para los pacientes diabéticos, quienes necesitan el medicamento para controlar su enfermedad”, explicó la doctora Calderón, haciendo un llamado a la responsabilidad en el uso de estos fármacos.